Susana llevaba días planeándolo meticulosamente. Su ansiada venganza se llevaría a cabo cuando acabara aquella sesión interminable de zumba. Todo el (...)

Que sentimientos tan extraños siente mi alma en estos días. Me han robado los abrazos , me han robado la alegría. Me han robado tantos (...)

Me levantaba cada mañana a las seis; era cuando ella encendía las primeras luces, se sentaba en un taburete frente a la mesa y se tomaba su café. (...)

Aún no ha amanecido. Jesús Nazareno baja la empinada callejuela tambaleándose lentamente, iluminado solo por las velas. Se detiene, tercera parada, (...)

Previo adiós Es mentira, claro está: sí puede perderse tanto Lo grita de (...)

Hace medio año di el paso de escribir un diario. Así nos conocimos Esther y yo. Pasamos juntas desde principios de verano hasta el final de (...)

Nací en Madrid, pero nunca me he sentido gata. Mi madre se fue a vivir a Madrid a los cinco años y mi padre a los diez, después de un aparatoso (...)

Algunas de tus verdades son cucarachas en la noche quieta de las cocinas. Habitan tu espacio y te vigilan, conviven contigo, tocando tus (...)

Marta, hermana. Tendrás que encargarte de decir a todos que los días tal y como los conocía se me han acabado. Me quedan pocas horas para estar (...)

Al final, después de pensarlo mucho, decidí contarle aquel secreto que había guardado durante años. Aquellos tiempos fueron una locura. Madrid vivía (...)

Sus labios bien delimitados, jugosos. Mi mirada fija en ellos. Desde que me agarré a la barra de sujeción del metro me fijé en esos labios. No podía (...)

Andrea había decidido suicidarse. Su analítica resultó positiva de Tricomavirus, el nuevo virus taiwandés que asolaba el planeta. En apenas un par de (...)

Se dispuso a escribir. Sabía que esa afición necesitaba disciplina. La inconstancia provocaba herrumbre mental, falta de agilidad y dificultaba que (...)

I Si inundas tu universo de palabras llenas o vacías, cuenta conmigo. Si escribes, una y otra vez, la misma frase dictada por otros, no (...)

No tiene barrotes de hierro ni puertas blindadas, no la puedo tocar, ni sentir a través de los sentidos, por lo tanto los demás tampoco. Sin (...)

Son las ocho y media. Abro la ventana. Hoy sí, el olor a primavera me inunda. El calor me reconforta. Es el primer día que siento esto. Flota en el (...)

La dama recostada lánguidamente entre almohadones. Entre siete se acomoda. La dama decadente de buena cuna, apropiadamente vestida para la (...)

Me escribes una breve carta, hija, a pesar de que te dije hace tiempo que lo evitaras, que me evitaras. Que no sabes con certeza por qué te (...)

Llevo más de tres semanas en casa y la verdad es que no lo llevo mal, sin darte cuenta te creas tu propia rutina y los días pasan, me asomo a la (...)

Corría el año 1937, era un frío mes de marzo, como todos los marzos en aquel pueblo toledano. Aquella mañana Maximiliana, una mujer de grandes ojos (...)

Cuando llegue la hora en la que mis ojos no vean ni la luz del día ni las lejanas estrellas del firmamento. Y yo olvide, de algún modo, tu rostro… (...)

A la casa de las palabras -soñó Helena Villagra- acudían los poetas. Las palabras, guardadas en viejos frascos de cristal, esperaban a los poetas y (...)

Tenía ganas de seguir paseando por el Parque de la Bota, en pleno corazón del barrio de la Ventilla, mi barrio. Pero esta vez no quería dar un (...)

Enmimismada Viernes, 22 de noviembre Hay días en los que prefiero quedarme ensimismada dentro de mi mundo (¿o tendría que decir “enmimismada”?) y (...)

Me pediste que sacara tus memorias, así que las cogí y nos sentamos en el sofá. Empleaste meses en escribirlas aunque solo eran unas cuantas (...)

No soporto 1. No soporto tu punto hortera por las mañanas cuando pones a todo trapo a Eros Ramazzotti mientras te duchas e imitas su voz (...)

Cuando Gervasio se sintió enfermo ingresó en el hospital para someterse a varias pruebas. Permanecería allí varios días por tanto le pidió (...)

Efectivamente, todo el autocar se identificó con la sonrisa de Marta, quien ocupó su asiento, justo detrás del mío; sonriendo le comentó a su (...)

La semana pasada fui a visitar la famosa feria de arte contemporáneo. Tenía mucha ilusión porque contemplar creaciones artísticas llena los ojos y (...)

Gélida como la melancolía que se expande por el salón los domingos en invierno. Esas tardes en las que observo cómo llueve al otro lado del cristal y (...)