Las Navas del Marqués a 28 de mayo de 2023 |
23 visitas ahora |
Tweet |
Este pasado domingo, en el campamento de Idomeni centenares de refugiados han intentado a travesar la frontera entre Grecia y la Antigua República Yugoslava de Macedonia. La policía para evitarlo ha comenzado a usar gases lacrimógenos y balas de goma para dispersarlos. El suceso provocó un momento de terror entre las personas, incluidos niños y ha dejado varios heridos.
Médicos Sin Fronteras ha atendido a casi 300 refugiados, siendo 200 de ellos por la exposición de gases y 30 por el impacto de balas de goma. Entre los heridos había tres niños menores de 10 años, según recoge El País.
Desde que el pasado 24 de febrero, Austria instara a los cuatro países de la ruta balcánica (FYROM, Serbia, Croacia y Eslovenia) a impedir el paso a más refugiados, la situación ha empeorado. Ha aumentado la desesperación. Idomeni se ha convertido en una ratonera de 11.000 personas que no pueden proseguir con su objetivo y se niegan a desalojar el campamento. ¿Cómo podemos permitir que en pleno siglo XXI haya personas viviendo en estas circunstancias?
En un principio, se les dio la bienvenida y se les prometió ayuda. Todos sabíamos que esto no iba a ser fácil, ni para nosotros ni para ellos. Pero les hemos dejado a un lado, en un punto ciego, donde vemos, leemos y escuchamos cosas sobre ellos y lo único que nos sale decir es “pobres sirios” “pobres niños”. ¿Verdad que si esas personas no fuesen sirios, afganos, palestinos, entre otros y fuesen por ejemplo de occidente, a qué no dudaríamos en darles nuestra ayuda?
Hablamos de modernidades ¿en dónde? Si las mentes, en vez de avanzar, retroceden. Día tras día hay atentados en Siria. ¿Acaso existe una banderita con su respectiva bandera en Facebook? No.
Entiendo que uno de los reparos de aceptarlos dentro de nuestra comunidad sea el miedo. Miedo a que sean yihadistas y vengan a combatir a nuestros países al laso del Estado Islámico. Pero, os recuerdo, que aquí en España, existía ETA y no todos los vascos eran iguales. ¿Es esta una razón para seguir dejando a la gente sufrir y morir día tras día?
Ahora, son ellos los que están sufriendo por buscar un lugar donde los acojan. Pero hace no mucho, durante la Guerra Civil en España (1936-1939) éramos nosotros los refugiados. Los españoles tuvieron que huir y buscarse un nuevo hogar. Nos aceptaron. E incluso México hizo sentir a aquellas personas como si estuviesen en su casa. Y al final, fue algo bueno para ambas nacionalidades.
Solo espero, que nosotros no tengamos que vernos en esa situación nunca. Porque por culpa de las actuaciones de ciertas personas y por no saber abordar este acontecimiento, son miles y miles las personas que ven como han arrebato la infancia a sus hijos en sus países de origen y que poco a poco sus esperanzas se van frustrando, y donde veían una posible luz al final del túnel, quizás ya no haya nada.